lunes, octubre 27

mi tribu

Constantemente azoto mi corazón contra la pared porque no sé soltar los afectos, una y otra vez caigo en el apego que no lleva a ninguna parte.
Al parecer no sé querer de otra forma y hasta ahora sólo consigo hacerme daño a mi misma.
Me pongo triste por lo burra que soy.
Siempre me digo que la gente tiene sus ritmos, sus modos de querer y de comunicar el afecto; todos lo hacemos de forma distinta y particular según como lo hemos aprendido. Y eso está bien, es lo rico de la diversidad entre las personas. Pero supongo que debe haber un terreno común, características similares que nos hagan atisbarnos, olernos y reconocernos como "pares", como compañeros de ruta.
Hasta hoy no creo encontrar a alguien que coincida del todo con mi forma de querer, o con mis tiempos, o ambas cosas juntas.
Obviamente no encontraré a alguien tal cual, no espero eso tampoco, pero hasta ahora siento a mi corazón como un exiliado, sin tribu aún.
Luego pienso que a las personas (amigos, familiares, conocidos) hay que disfrutarlas el ratito que te quieran brindar sin esperar más.
Ojalá sin querer ni pedir más.
Ya aparecerá alguien con quien se puedan esos "más" (unos "más" que no significarán esfuerzo para ninguna de las partes pues saldrán como algo natural dentro de la relación. Y con "más" no me refiero a más cariño ni amor, obvio).
Eso igual es algo que me motiva hacia el futuro, pensar y saber que así como yo busco a alguien, allá afuera hay alguien que me busca a mi.
Seguramente más de alguien, toda una tribu!! jeje.

No hay comentarios: